La enfermedad de Alzheimer, una forma de demencia, es una afección cerebral progresiva y degenerativa que afecta a la memoria, el pensamiento y la conducta.
La causa no se conoce por completo, pero se cree que abarca tanto factores genéticos como ambientales. Los factores de riesgo más importantes son la edad avanzada y los antecedentes familiares.
El diagnóstico de esta enfermedad se hace sobre la base de síntomas característicos y excluyendo otras causas de demencia. La única forma de saber con certeza que alguien sufrió la enfermedad de Alzheimer es por medio de estudios microscópicos de una muestra de tejido cerebral después de la muerte.
los síntomas pueden ser muy sutiles y pueden parecerse a signos que muchas personas erróneamente le atribuyen al "envejecimiento normal". Entre los síntomas se encuentran uno o más de los siguientes:
- Repetición frecuente de enunciados.
- Ubicación equivocada de cosas.
- Dificultad para recordar el nombre de objetos conocidos.
- Perderse en rutas conocidas.
- Cambios de personalidad.
- Perder interés por las cosas que antes se disfrutaba.
- Dificultad para realizar tareas que requieren algo de elaboración mental, pero que solían ser fáciles, y aprender rutinas o informaciones nuevas.
los síntomas son más obvios y pueden abarcar:
- Olvidar detalles acerca de acontecimientos corrientes.
- Olvidar eventos en la vida personal, perdiendo conciencia de quién se es.
- Problemas para escoger la ropa apropiada.
- Alucinaciones, discusiones, repartir golpes y conducta violenta.
- Delirio, depresión y agitación.
- Dificultad para realizar tareas básicas como preparar alimentos y conducir.
la persona ya no puede vivir sin ayuda. La mayoría de las personas en esta etapa:
- Ya no reconocen el lenguaje.
- Ya no reconocen a los miembros de la familia.
- Ya no son capaces de desempeñar las actividades básicas de la vida diaria como comer, vestirse y bañarse.
No existe cura para la enfermedad de Alzheimer. El pronostico es de incapacidad total y muerte por lo general al cabo de 15 años, aunque la evolución y el tiempo de supervivencia varia mucho de un caso a otro. Los objetivos del tratamiento son:
- Disminuir el progreso de la enfermedad mediante tratamiento farmacológico y suplementos alimenticios (Vit. B9, Vit. E, antioxidantes, ginkgo biloba, etc.).
- Manejar los problemas de comportamiento, confusión y agitación.
- Modificar el ambiente del hogar simplificando los alrededores del paciente y proporcionando recordatorios frecuentes.
- Apoyar a los miembros de la familia y otras personas que brindan cuidados. Existen grupos de apoyo con el fin de encontrar recursos e información adicional para personas con enfermedad de Alzheimer y para las personas que cuidan de ellos.